Y llegó el día tan esperado...
Es el día de partir, de dejar atrás otra etapa de sus vidas para
comenzar una nueva.
Y eso es difícil.
Pasaron siete años y con ellos,
quedaron sueños, fantasías, historias, anécdotas...
buenos y malos momentos compartidos con amigos,
miles de recuerdos que hoy se acumulan en la memoria
como queriendo salir,
como queriendo salir,
intentando detener el tiempo para evitar la
partida.
Recuerdos para ser contados permitiendo que una lágrima escape
de nuestros ojos.
Recuerdos que, aunque parezcan lejanos,
nunca podrán
ser olvidados.