Al igual que en el resto del mundo, miles de musulmanes en Argentina, celebraron el pasado domingo 19 de agosto, la fiesta del desayuno, marcando la culminación del sagrado mes de Ramadan, noveno del calendario lunar islámico.
La celebración de Id Al Fitr (fiesta del desayuno), al día siguiente de finalizado el mes de Ramadán, depende del nacimiento de la luna nueva (hilal) que marca el comienzo del mes siguiente, en este caso el décimo, que recibe el nombre de Shawal.
Con esta celebración, culmina el mes de Ramadán que ha sido un mes en el que los musulmanes, siguiendo los preceptos del Sagrado Corán, se abstienen de comer, beber y mantener relaciones sexuales desde el despuntar de la aurora hasta la puesta del sol.
El ayuno posee múltiples beneficios individuales y colectivos. La experiencia del hambre y la sed purifica y desintoxica el cuerpo del ayunante, a la vez que le hace tomar conciencia de la dura realidad de los necesitados, haciéndole así más proclive a la solidaridad y ayuda al prójimo.
La tradición islámica nos indica que fue durante el mes de Ramadán cuando Dios reveló el Sagrado Corán al profeta Muhammad (P y B).
Fuente: Dto. de Cultura Árabe